Hace más de 90 años en Carbonero el Mayor, un pequeño pueblo a los pies de la Sierra Segoviana, Don Virgilio Pascual comenzó a elaborar chorizo a nivel local.

Por aquel entonces, la empresa estaba formada por dos personas que, ayudadas por un grupo de mujeres del pueblo, trabajaban duramente, pero con cariño, para atender la incipiente demanda de nuestros productos naturales.

Más tarde, con ayuda de su hijo Mariano Pascual, artífice de la empresa actual, empezó a abrir mercado y se dedicaron en cuerpo y alma a la curación de jamones y embutidos.

Hoy, la plantilla de Mariano Pascual se ha multiplicado por diez.

Carbonero el Mayor fue el lugar escogido por Mariano Pascual para ubicar su primera fábrica, añadiéndose en 1992 unas nuevas y modernas instalaciones en Tabanera la Luenga, que se ampliaron en el año 2006.

Ambas localidades se encuentran a los pies de la Sierra de Guadarrama, una zona geográfica que, por sus inviernos fríos y húmedos y sus veranos secos y cortos, es especialmente idónea para la curación lenta y natural de jamones y embutidos.

Estos factores son importantes para conseguir el genuino sabor de una buena pieza de Jamón Ibérico, un buen Jamón Serrano y un delicioso Chorizo de Cantimpalos.

Controlamos con cuidado todos los procesos, desde la selección de la materia prima hasta la presentación final del producto, con un especial hincapié en una esmerada curación natural.

En nuestras instalaciones, además de salas de secado de ciclo completo, disponemos de toda la infraestructura necesaria para el deshuesado, envasado al vacío y embalado de nuestros productos.

Desde 1930, hemos trabajado y adoptado innovaciones para garantizar unos jamones y paletas de alta calidad, fruto de una rigurosa selección en origen de la materia prima, por su peso y conformación.

Productos